¿Cómo puede existir un pueblo que vive sobre el agua desde hace siglos y que no siente frío por la sangre que dicen tener? Además, en las Islas flotantes de los Uros se hablaba una lengua misteriosa que hasta el 2024 solo dos personas la recordaban. Descubre toda la información que necesitas saber antes de visitar las islas de los Uros.
Las Islas Flotantes de los Uros son un grupo de islas artificiales hechas de totora y construidas en el lago. Además, los Uros habitan estas islas y las ubican en la bahía de Puno, y también se encuentran al oeste del lago Titicaca y al noreste de Puno a una altitud de aproximadamente 3810 metros sobre el nivel del mar (12,500 ft). Incluso ves que las islas están situadas a 7 km de la ciudad de Puno, a 25 minutos de distancia.

Los Uros habitan un archipiélago de aproximadamente 120 islas flotantes en constante crecimiento en el lago Titicaca cerca de Puno. Incluso sabes que la comunidad tiene una población de 272 familias identificadas.
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Historia de las islas flotantes de Uros
Los Uros crearon sus hogares sobre el agua para protegerse y ellos podían moverlos fácilmente en caso de peligro. Por eso, sus asentamientos eran una defensa natural. También verás torres de vigilancia en muchas islas. Los Uros se consideraban dueños del lago y del agua. Porque cuando lo visites sentirás ese respeto profundo que todavía conservan.
Ellos descienden directamente de la misteriosa cultura milenaria Pukara, que existió hacia el año 1500 a. C. Los estudiosos dicen que fueron los primeros habitantes del lago Titicaca e incluso ancestros de la cultura Tiahuanaco. Según la leyenda, los Uros vienen de un pueblo que hablaba puquina. Además, ellos mismos se llamaban Lupihaques, que significa “hijos del Sol”.

Con el tiempo su lengua original se perdió poco a poco y fue reemplazada por el aymara.
De hecho, hace unos 500 años dejaron de hablar el idioma uru, y en 2004 solo quedaban dos personas que aún lo hablaban. Sin embargo, a pesar que su lengua casi desapareció, ellos mantienen su identidad.
Los Uros cazaban y pescaban truchas y bagres. También domesticaron ibis andinos para comer sus huevos y cazaban martines pescadores. Más adelante empezaron a criar ganado cerca de las orillas y a comerciar con los aymaras.
Gracias a esos intercambios, se mezclaron mediante matrimonios y adoptaron el idioma aymara. En tiempos antiguos, los incas los conquistaron y les exigieron tributos; algunos incluso fueron esclavizados.
Desde 1722, los Uros y los Aymaras tuvieron conflictos hasta que en la década de 1970 los Aymaras tomaron sus tierras.
Aun así, los Uros resistieron y siguieron viviendo con esperanza. En 1986, una tormenta devastadora los obligó a acercarse a las orillas del lago, pero no perdieron su espíritu.
La gente del lugar dice que los Uros tienen sangre negra y que por eso no sienten el frío. Decidieron retirarse al centro del lago no por miedo, sino por amor a su libertad y su tranquilidad.
Cómo construyeron las islas
Los Uros construyeron las islas flotantes de uros apilando y trenzando gruesas capas de raíces de totora para formar una base sólida. Primero las familias locales recolectan grandes cantidades de raíces de totora. Es una planta que crece naturalmente en el lago Titicaca.

Ellos se dieron cuenta que las raíces de totora (también llamada “khili”) flotan como si fuese un corcho.
Los bloques de raíces de totora son atados con cuerdas para formar una base flotante. Luego añaden una capa gruesa de totora fresca sobre la base de raíces.
Después cubren la isla con varias capas de totora seca, trenzando y cruzándola para lograr una superficie firme y estable. Como si fuese un colchón gigante, porque al pisarla notarás lo suave que es.
Repiten este proceso constantemente para mantener la estructura resistente. Y encima de ello recién construyen sus casas.
Los Uros anclan las islas al fondo del lago con troncos y cuerdas para evitar que se desplacen por las corrientes.
Imaginate si no lo hicieran, podrían irse a dormir y luego amanecer en territorio boliviano.
Cada 15 o 20 días, el sol y el calor erosionan la totora. Entonces ellos tienen que hacer mantenimiento, así que los Uros agregan nuevas capas frescas para mantener la isla a flote.
La lengua extinta de Puquina
Los investigadores asocian la lengua puquina con la impresionante cultura que construyó Tiwanaku. Además, hay teorías muy interesantes que dicen que el “Qhapaq Simi”, la lengua secreta de la nobleza inca, estaba relacionada con el puquina, mientras que el pueblo común hablaba quechua o “Runa Simi”.
Imagínate, eso significa que incluso los Incas pudieron conservar parte de esta lengua misteriosa.

Por si fuera poco, se cree que esa influencia comenzó después del colapso del Imperio Tiwanaku, alrededor del año 1000 d. C., cuando hubo migraciones hacia el sur.
Existían grupos indígenas que hablaban el puquina, también conocido como pukina, en la región del lago Titicaca, entre Perú, Bolivia y el norte de Chile.
¿Cómo viven los pobladores de Uros?
De qué se alimentan en la isla
Las familias preparan sus platos con trucha, pejerrey, mauri y carachi. Además, siempre los combinan con tubérculos, cereales y hortalizas que cultivan en la región. Son platos nutritivos. Entre las comidas típicas destacan el Chaulla Thimpo, que preparan con diferentes tipos de pescado, y el Thimpo de trucha, que es más suave. 
También te recomiendo probar el Chicharrón de trucha, ¡es espectacular! Los locales pescan ispi y carachi, así que todo es fresco.
Además de cocinar, los Uros aprovechan la naturaleza de una forma única. Gran parte de su dieta y medicina gira en torno a las cañas de totora, las mismas que usan para construir sus islas.
Cuando arrancan una caña, comen la parte blanca de la base, rica en yodo, para prevenir el bocio. La totora es vital para ellos, así como la hoja de coca lo es para los pueblos andinos.
Les ayuda a calmar el hambre y a resistir el frío intenso del lago. Y cuando alguien siente dolor, simplemente envuelven la parte afectada con la caña.
Es increíble cómo una sola planta puede ser alimento, medicina y hogar al mismo tiempo.
¿Hay escuelas?
Te encantará notar cómo los profesores viajan en bote para llegar a las clases. Este gran cambio comenzó en 1963. En ese año, la educación llegó por primera vez a las islas gracias a la “Misión Adventista del Lago Titicaca”.
Ellos crearon la primera escuela particular y enseñaron a los niños a leer, escribir y soñar más allá del agua. A veces, los mayores te cuentan con orgullo cómo fue aquel primer día de clases sobre una isla flotante.

Antes de todo eso, los Uros no sabían leer ni escribir. Vivían completamente aislados en las profundidades del lago, en sus islas, y no conocían la existencia de escuelas. Por eso, no le daban importancia a la educación de sus hijos. Imagínate crecer rodeada de agua, sin libros ni maestros, pero con una sabiduría ancestral basada en la naturaleza. Así era su vida antes de que llegara la educación moderna.
La Religión
Los pobladores practican la religión andina, con rituales como el pago a la Pachamama y a Cotamama. Símbolos de respeto y gratitud hacia la naturaleza. Además, mantienen viva la religión católica, una herencia cultural que los españoles dejaron siglos atrás.
En los últimos años, también notarás que algunas familias adoptan nuevas creencias, como las religiones adventista y de los testigos de Jehová.
Cómo es el clima
Vas a sentir un clima frío y seco desde el primer momento. La temperatura promedio anual alcanza los 14° C, así que lleva abrigo ligero. Además, notarás que las islas tienen dos estaciones bien marcadas: invierno y verano. 
Durante el invierno, que va de mayo a agosto, el ambiente se vuelve más fresco y tranquilo. En este tiempo caen lluvias esporádicas así que no tendrás que preocuparte demasiado por la lluvia. La temperatura promedio llega a 12 °C, pero prepárate, porque por las noches puede bajar hasta los 4 °C bajo cero. Sin embargo, durante el día disfrutarás de un cielo azul acompañado de vientos secos que refrescan el paseo.
Si decides viajar entre diciembre y abril, vivirás el verano en los Uros. En esta época las lluvias se vuelven torrenciales y muchas tardes llegan con relámpagos, truenos y oleaje. La temperatura promedio es de 14 °C y puede subir fácilmente hasta los 20 °C, ideal si te gusta sentir el contraste entre sol y lluvia.
¿La electricidad es un problema?
Cuando llegues a las islas Uros, te sorprenderá ver que todas las familias usan paneles solares. Lo que hace que la vida en el lago sea sostenible y limpia. También notarás que todas las familias usan celulares. Estos se vuelven esenciales para su trabajo en el turismo y para mantenerse conectados. 
En cuanto al agua, los pobladores hierven el agua del lago antes de beberla. Este proceso garantiza que sea segura para el consumo. Todo esto demuestra cómo aprovechan los recursos naturales de forma responsable y práctica.
Por último, el sistema de desagüe es bastante ingenioso. Los pobladores construyeron una pequeña isla aparte para realizar sus necesidades. Luego cubren esa zona con totora, lo que ayuda a mantener la limpieza del entorno. Este método puede parecer simple, pero muestra su respeto por el lago y su capacidad para convivir en armonía con la naturaleza.
Las artesanías que mantienen viva la economía local
Cuando llegues a las islas Uros, notarás que cada familia vive de su arte. Todas venden productos artesanales que mantienen viva la economía local. Lo bonito es que todos participan: hombres, mujeres y niños aportan su talento para crear. Además, los pobladores venden directamente a los turistas, tanto nacionales como internacionales, lo que hace que tu compra tenga un impacto real en su comunidad. 
Las mujeres elaboran textiles llenos de color y detalle, mientras los hombres trabajan con la totora para dar forma a diferentes objetos. Los niños, por su parte, se divierten creando pulseras y pequeños adornos.
Los bordados muestran las actividades diarias y los dioses tutelares que protegen a la comunidad. Con la totora elaboran sombreros y pequeñas balsas que representan su conexión con el lago. Además, encontrarás cerámica, pulseras, vinchas y muchos otros souvenirs que podrás adquirir.
Como llegar
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Desde Lima
Una vez que llegues a Lima, puedes tomar un vuelo hacia la ciudad de Juliaca. El tiempo de vuelo es un promedio de 1 hora y 35 minutos. Si viajas por tierra, el tiempo en Bus es de 17 horas de viaje hasta Arequipa, dependiendo de la empresa que elijas. Y luego de Arequipa a Juliaca es de 5 horas y 30 minutos de viaje en bus.
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Desde Juliaca
Una vez que llegues al aeropuerto internacional Inca Manco Cápac de Juliaca. Tienes que tomar de la ciudad una minivan que te llevará hasta la ciudad de Puno en un tiempo de 40 minutos en promedio.
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Desde Puno
Luego en la ciudad de Puno te diriges a la orilla del lago, donde podrás coger un bote y dentro de 30 minutos estarás en la isla flotante de los uros.
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Desde Cusco
Desde Cusco para ir a la Isla de Uros tienes que tomar un bus directo a la ciudad de Puno, el tiempo de viaje es de 7 – 8 horas en promedio.
Que vas encontrar ahí
Vista panoramica de la isla de los Uros
La combinación perfecta del conjunto de islas flotantes acompañado del lago, el cielo azul y la observación de las aves convierten en un atractivo natural y único. Además, la isla más grande ofrece un pequeño museo con una colección de aves disecadas. También puedes ver sus textiles, sus bordados y cómo secan el carachi al sol. Después de explorar lo principal, una isla flotante de totora se ancla en las profundidades del lago y allí viven comunidades locales de los Chulluni. 
Que animales y plantas verás
En sus aguas y alrededores los investigadores han identificado más de 350 especies de aves acuáticas, incluyendo 35 especies nativas y 16 migratorias. Por eso tú ves patos, gallaretas, galapados, parihuanas y el zambullidor del Titicaca con mucha facilidad. 
Asimismo, en cuanto a los peces del lago, destacan especies como el suche, ispi, la trucha y el carachi. También coexisten con anfibios únicos como la rana gigante del Titicaca y el zampullín Titicaca.
Alrededor de la isla de Uros presenta 12 variedades de plantas acuáticas. Entre ellas destaca la famosa totora, esencial para la construcción de islas flotantes y embarcaciones. Además, incluyen llachos, urima, lentejas de agua y más.
Tours a las islas de uros
Tour de medio dia
Cuando haces este tour tú empiezas con el recojo de los hoteles del centro de Puno o desde el muelle. Después te subirás a un barco para partir. Luego llegas a las islas y la visita de 2 Islas Flotantes ocurre. Finalmente, tú disfrutas todo el recorrido y después regresas a los Hoteles del Centro de Puno.
También cuentas con un guía profesional bilingüe en español e inglés y tienes el ingreso a las islas de Uros. Incluso viajas con transporte seguro en lancha a motor. Sin embargo, debes considerar que no incluye propinas.

- Los precios de los tours son de 11 dólares a 15 dólares.
Si deseas también puedes pasear en bote local Balsa de Totora en los Uros es opcional. El precio es de S/15.00 soles o $5.00 dólares por persona y el pago es al poblador. Por eso, es bueno que lleves efectivo.
Tour al Lago Titicaca y la Ruta del Sol 3 días
Experimentarás navegar por la laguna de Titicaca y tradiciones vivas de las comunidades de las islas flotantes de Uros y Amantaní. Además, esta aventura de 3 días y 2 noches garantiza una historia profunda, inmersión cultural y una gestión logística impecable desde el inicio hasta el final. 
Primero visitarás Cusco con Andahuaylillas, Raqchi y La Raya, y también pasa por Puno con Pucará. Después culmina en el Lago Titicaca con Uros, Amantaní y Taquile.
- El coste total de este viaje es de $170.00 USD por persona con Uros expeditions.
- Finalmente, te cuento que la excursión combina transporte terrestre, servicio de bote y caminatas cortas.